Resumen
Como joven anestesióloga que ha trabajado en su hospital durante unos tres años, Hanaoka Hanako casi ha terminado con su trabajo. Las horas son agotadoras y nunca hay suficientes manos. Sus compañeros de trabajo son unos idiotas desagradables que la llaman incompetente o unos groseros sexistas que intentan arrebatarle un sentimiento. Casi nunca ve el cielo, tiene que comer una taza de ramen en la mayoría de las comidas y no tiene vida social de la que hablar. Lo peor de todo es que su trabajo es ingrato. Todo el mundo ama a los cirujanos que realizan operaciones que salvan vidas, a los paramédicos que acuden rápidamente a los lugares de emergencia o a las enfermeras que brindan atención primaria, pero los anestesiólogos sólo son elegidos si algo sale mal y se pierde un paciente. Aún así, alguien tiene que hacerlo, y si no ella, ¿quién?
Entonces, incluso con un salario de mierda, horas de trabajo terribles y acoso sexual... ¡la anestesióloga Hana estará feliz de noquearte!