Resumen
La tierra en ELNA SAGA se llama Gimrey, y supuestamente en el pasado lejano, antes de que la magia se convirtiera en parte de cada persona, un gran monstruo había descendido desde el norte y asolado el mundo. Avivando grandes ráfagas de viento mágico destructivo, redujo casi todo a un páramo vacío antes de que apareciera un caballero para desafiarlo.
Portando una espada sagrada y un escudo que rechazaba la magia, este caballero finalmente derribó al monstruo después de una tremenda batalla. Pero esta criatura no quería morir y, mientras yacía inmóvil, el viento brotaba implacablemente de sus heridas. Con lo último de sus fuerzas, el caballero plantó su espada en lo alto de la montaña donde se había librado la batalla, para proteger una parte de la tierra del viento. Este fue el comienzo de Gimrey y la razón por la que todos nacemos con magia innata.
Con el paso del tiempo, la gente empezó a pelear por terrenos fértiles. ELNA SAGA comienza justo antes del estallido de otra guerra y habla de una princesa llamada Elna. Nacida sin ningún tipo de magia y, como tal, siendo la única persona que realmente puede tocar la espada sagrada que protege a Gimrey, se convierte en un peón utilizado por su reino para amenazar a otros países con la destrucción. Sin embargo, el intento de asesinato de un reino rival se convierte en rescate cuando los que están detrás de este complot revelan que no tienen reparos en matar a Elna siempre que puedan mantener una fachada usando un doble. Con la ayuda de su posible asesino, que se siente atraído por su inocencia y compasión, Elna viaja para definirse a sí misma y detener una terrible guerra que ha iniciado su país.
Lo primero que uno nota es la riqueza del mundo en el que se desarrolla esta serie. Las ideas detrás de ELNA SAGA se extraen libremente de la cultura y la mitología nórdicas y la historia, las personas y los nombres tienen un sabor medieval del norte de Europa. No hay dioses ni razas no humanas, pero las Valquirias, los Berserks y el árbol del mundo Yggdrasil hacen su aparición de una forma u otra, y los castillos y ciudades evocan recuerdos nostálgicos de viejos libros de cuentos.