Resumen
Izaki siempre tuvo confianza en la escuela y tenía que esforzarse para ser el mejor. Es mucho lo que pones en el escenario. Es más que capaz de estar a la altura, ya sea en el club o en el tenis. También le gusta ser contrario a los demás y ver a través de sus tonterías y fanfarronadas, lo cual es tan refrescante. Ni siquiera lo hace para lucirse, solo porque la superficialidad de la gente lo molesta.
Hakamada es el tranquilo. Las aguas tranquilas son profundas, aparte del hecho de que siempre parece insípido. Él es el prodigio en la medida en que las cosas le resultan fáciles. No tiene que trabajar o estudiar y solo se las arregla para llegar a la cima, lo cual es frustrante para Izaki, quien se da cuenta de que nunca alcanzará ese nivel, no importa cuánto lo intente.
Así que hay un poco de rivalidad entre ellos, pero no tanto porque Izaki sabe que no tiene ninguna posibilidad de ponerse al día. Aunque, no se da cuenta de que Hakamada nunca compitió con él. Y luego está la atracción de Hakamada que Izaki no puede entender en absoluto.
8 años después de eso.
Después de una reunión escolar, Izaki se encuentra en una relación que nunca acordó con Hakamada, el chico que odiaba tanto en la escuela secundaria. Hakamada tiene cara de piedra y no responde como si estuviera de regreso en la escuela y es interesante ver sus torpes y sinceros intentos de acercarse a Izaki, quien piensa que solo lo están utilizando para el sexo.