¡Sanar, sanar, sanar!

El primer día de clases en un bar, Go Shinjae, un estudiante de danza alto y guapo de una familia prominente, escucha a Baek Hanbin, un pálido estudiante de fotografía borracho con enormes lentes horteras, confesando su amor hacia una persona que conoció en línea en un juego. La confesión de amor borracho de la que Go Shinjae normalmente se habría reído, fue un poco extraña. Por alguna razón, la persona que le gusta a ese borracho parece ser él. Al día siguiente, Go Shinjae decide encogerse de hombros, pero Baek Hanbin entra al salón de clases de una clase electiva que Go Shinjae está tomando. Además de eso, Go Shinjae y Baek